Recuerdo cuando una de las miles de parejas del mundo, iban cogidos de la mano por una alegre París atravesando la Torre Eíffel, esa torre que se enciende un 14 de febrero como nunca.
Ellos debajo de la luz de una pequeña farola cubierta por una nieve blanquecina, aquella nieve que hacia reír a los más pequeños de todas las familias, juntos arropando-se,acariciando-se, besando-se.
Aquellos momentos hacían feliz a aquella joven llena de ilusión.
¿Dónde quedaron esas risas? Desaparecieron con el triste otoño que llego unos meses más tarde,cuando aquel joven se largo de su vida. París se lleno de una enorme tristeza para aquella chica,las luces de la Torre Eíffel no alegraba a la chica al siguiente 14 de febrero, justo ella atravesando aquella triste noche de París por debajo de la Torre Eíffel, con esa nieve grisacea por las pisadas, lo vio junto a otra mujer, y le dijo las mismas palabras que un año atrás el le había dicho a ella "Pequeña , tranquila este día pasara muchos mas años y nuestro amor perdurará siempre". En ese momento ella supo que eso solo era un simple recuerdo.
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